Si sólo hubiéramos sabido
Que nos estabas lavando el alma
Y planchándonos el carácter
De la noche hasta el alba.
Que al fregarnos nuestros males
Nos amabas más que a ti
Al barrernos todo el día
Purificabas a Turo y a mí.
Si sólo hubiéramos sabido
Más sonrisas, menos quejas
Te habríamos ofrecido.