Inspiración: conchoromántico
Talvez no hayan gónadas, pero sí conchos para pasearte.
Talvez no hayan majestuosos ríos para navegar pero sí calles con hoyos para aventurar.
Talvez no tenga modernas vías sobre el mar, pero sí un elevado, a unos metros del suelo, para sentirnos flotar.
Talvez no tenga la Torre de Pisa o Eiffel para admirar, pero sí al Monumento para contemplar.
Talvez no tengamos ese clima templado propicio para abrazar, pero sí un calor sofocante que nos invita al agua anhelar.
Talvez no tengamos lujosos vehículos propios para transitar, pero sí nuestros pies para encontrarnos y caminar.
Talvez la noche sea oscura y nos tengamos que separar, pero mañana el sol volverá junto a la esperanza de volvernos a encontrar.
septiembre 19, 2009
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